No sabían lo que les esperaría de esta tarta, porque no les dí ninguna pista y seguí tal cual me dijo María José de "haz lo que quieras"....así que mi cabeza empezó a diseñar la tarta, con regadera incluida....
Me ha encantado trabajar en ella, porque disfruto con el proceso de creación casi tanto como con el de montaje de la tarta, cuando va cobrando vida esa imagen que te has creado...
En mi retina, se quedará siempre, ver a Ainhoa esperando, con esa cara de sorpresa, de alegría, de emoción....
Muchas gracias familia, es tremendo tener gente como vosotros tan cerca
Un abrazo y mil besos
Bizcocho de chocolate con mouse de ganache de chocolate blanco
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